Morder la mordaza

Para la Libertad

Para la libertad, sangro, lucho, pervivo. 
Para la libertad, mis ojos y mis manos, 
como un árbol carnal, generoso y cautivo, 
doy a los cirujanos.
Para la libertad siento más corazones 
que arenas en mi pecho: dan espumas mis venas, 
y entro en los hospitales, y entro en los algodones 
como en las azucenas.
Para la libertad me desprendo a balazos 
de los que han revolcado su estatua por el lodo. 
Y me desprendo a golpes de mis pies, de mis brazos, 
de mi casa, de todo.
Porque donde unas cuencas vacías amanezcan, 
ella pondrá dos piedras de futura mirada 
y hará que nuevos brazos y nuevas piernas crezcan 
en la carne talada.
Retoñarán aladas de savia sin otoño 
reliquias de mi cuerpo
que pierdo en cada herida. 
Porque soy como el árbol talado, que retoño: 
porque aún tengo la vida.

Miguel Hernández 

Comentarios

  1. Sin duda, morder la mordaza. Con la ley del mismo nombre nos encontraremos, nuevamente, con que este poema de Machado, será vigente de nuevo

    Un abrazo

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    Respuestas
    1. Ya lo es, Albada. Se multiplican los casos de represión, la legislación se va endureciendo: además de la ley mordaza se han hecho otras. En esas condiciones, no tenía ganas de comentar ningún libro, necesitaba lanzar un grito de alerta.
      (No es Machado, pero a este también le puso música Serrat) 😉
      Saludos

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